Pasar al contenido principal
27/12/2024

Buscan habitantes Lisboa cerrar el aeropuerto local por ruido y contaminación

Redacción A21 / Jueves, 5 Diciembre 2024 - 01:00
Cerca del 10% de la población convive con 912 vuelos que cada día pasan por el Humberto Delgado

Los habitantes de Lisboa están hartos de convivir con su aeropuerto pues aseguran que es una céntrica fuente de ruido, contaminación y malos olores que hace insoportable la vida en gran parte de la ciudad, especialmente desde el fin de la pandemia.

Los habitantes de los barrios del norte de la capital están recogiendo firmas para reclamar el cierre definitivo de la terminal, después de que el Gobierno prohibiera este mes los vuelos nocturnos, una medida con poco impacto ya que la mayoría no opera de madrugada. 

Sérgio Morais, vecino del barrio de Alvalade, es uno de ellos. Su casa colinda con el aeropuerto lisboeta Humberto Delgado y desde su salón es posible ver y escuchar aviones pasando cada 10 minutos. 

"Pero eso no es lo peor," admitió a la agencia de información EFE, entre el ruido de despegues y aterrizajes debe dormir con tapones en los oídos, pese a instalar cristales dobles en las ventanas de su dormitorio. 

“También están la polución y el olor a combustible, que de un tiempo a esta parte se notan cada vez más”, subrayó el vecino, que todos los días a mediodía sufre el ensordecedor aterrizaje de un Boeing 777 procedente de Emiratos Árabes Unidos (EAU).

El Humberto Delgado opera vuelos durante todo el día −tan solo interrumpe el servicio entre la 01:00 y las 04:00− y es uno de los pocos aeródromos de Europa donde los aviones sobrevuelan la ciudad durante sus maniobras de aproximación.

Cuando el aeropuerto se inauguró en la década de 1940 estaba en la periferia de Lisboa pero, con su expansión, la ciudad ha acabado engulléndolo. 

Estas circunstancias generan ruidos constantes que superan los 45 decibelios en buena parte de la urbe: un nivel de volumen que puede perturbar el sueño, dificultar la concentración y complicar el aprendizaje en niños y adolescentes.

"A veces los cristales y los tapones no son suficiente y tienes que tomarte un antihistamínico", reconoció Morais, quien señaló que es una combinación eficaz para conciliar el sueño, pero que le preocupa por las posibles consecuencias en caso de emergencia o incendio. 

Más de 400,000 personas −cerca del 10% de los habitantes de Lisboa− conviven con el ruido generado por los 912 vuelos que cada día pasan por el aeropuerto Humberto Delgado, según la organización ecologista ZERO.

La activista Isabel Colher, de la plataforma 'Aeroporto Fora, Lisboa Melhora', aseguró que todo el mundo conoce este problema, ya no es una cuestión sólo de Lisboa.

Esta campaña ha recopilado hasta la fecha 2,500 de las 7,500 firmas necesarias para que una comisión parlamentaria debata la cuestión. 

Facebook comments