Los miembros de la Unión Europea están barajando la idea de que las fronteras de los 26 países de la alianza Schengen permanezcan cerradas hasta septiembre, señaló el presidente de Francia, Emmanuel Macron, de acuerdo con medios locales franceses.
La razón principal que dio el mandatario francés es que la pandemia de coronavirus, COVID-19, está afectando a un diferente ritmo de distintas partes del mundo y “no llegó a todos los países al mismo tiempo”.
Los miembros del área Schengen son: Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Islandia, Italia, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Malta, Noruega, Países Bajos, Polonia, Portugal, República Checa, España, Suecia y Suiza.
De acuerdo con la televisora francesa BFMTV, Emmanuel Macron citó como ejemplo a los Estados Unidos, donde la crisis del COVID-19 llegó varias semanas más tarde que Europa y que, por lo tanto, no ha alcanzado su pico.
De igual forma, África y América Latina aún van en la curva ascendente y se espera que pueda haber un segundo pico del COVID-19 en Asia.
Australia es otro país que podría mantener sus fronteras cerradas, probablemente hasta finales del año.
De acuerdo con el ministro de Turismo de este país, Simon Birmingham, actualmente es muy difícil predecir en qué momento del año los vuelos internacionales regresarán y que “nadie debería de estar adelantándose a los hechos en este momento”.
De igual forma, Birmingham invitó a que los australianos planeen viajar domésticamente y no a otros países.
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